I.

Tengo que confesar que desde que llegué (o mejor dicho “me instalé”) en Yogyakarta, comencé a tener dudas sobre qué escribir en este blog.

Si bien las palabras me fluyen como nunca, parecen fluir hacia otros rumbos: me la paso traduciendo mis textos a inglés, escribo pensamientos de todo tipo en mi cuaderno, escribo y memorizo palabras en indonesio, escribo cartas para mis amigos…

Pero esto de no estar “viajando” (técnicamente) (en el próximo post debería hacer un Tratado sobre el Viajar para que se entienda qué significado le doy a este término) hace que, para mí, todo lo que me rodea pase a ser “normal”.… Seguir leyendo...